Cuando pensamos en vacaciones, nos llegan las ideas de viajar y aprovechar el descanso. Muchas veces con cambios en nuestras rutinas. Nos llegan algunas dudas: ¿dónde hospedarme? ¿Qué voy a comer? ¿Tengo que cambiar toda mi rutina?
Existen varios factores que hay que tener en consideración, y todo esto dependerá de lo que hagas en vacaciones y los planes que tengas en mente.
Recuerda que cuando ya tenemos incorporado, el chip en nuestro cerebro de comer naturalmente, siempre encontraremos opciones saludables donde quiera que estemos. Y si estás en vías de mejorar tu alimentación, uno o dos días poco saludables no arruinan tu estilo de vida por completo. Lo que de verdad importa es la suma total de las ingestas que hagas en el día.
El verdadero problema aparece cuando nos pasamos de los límites y regresan viejas costumbres, como los excesos: de alimentos procesados, harinas, azúcares. Muchas veces olvidamos por completo nuestros hábitos saludables.
6 consejos para llevar un estilo saludable y mantener tus hábitos en vacaciones
1. Escoge alojamientos sostenibles
Decídete por algún apartahotel o alojamientos que tenga políticas de sostenibilidad. Esto nos ayuda a mantenernos enfocados en nuestros hábitos saludables. Este tipo de alojamientos nos garantizan alimentos orgánicos, frescos y generalmente comprados a proveedores locales. Y si incluyen una cocida equipada, pues mucho mejor. Click aquí para que conozcas uno de ellos.
2. Planifica tus comidas
Al viajar cambian nuestros horarios. Por eso, la clave es fluir con las nuevas horas y seguir con nuestras rutinas saludables. Muchas veces somos flexibles y hacemos dos comidas grandes y varios snacks. Cuando planificas las comidas antes de salir de casa, puedes distribuir mejor las qué haces en el alojamiento y las qué haces fuera. Trata de programar un menú rápido y sencillo. Aquí tienes un ejemplo.
3. Muévete
Mientras puedas, no dejes de moverte. Hay que mantener el cuerpo activo para el buen flujo sanguíneo de todos los órganos y músculos, además de mantener tu metabolismo activo.
Si estás esperando un vuelo, un tren o un autobús, no te sientes, pasea a buen ritmo por la terminal y sáltate las cintas y ascensores si es posible. Planifica caminatas por la orilla de la playa o algunas con pendientes y escalones
4. Hidrátate
No olvides tomar agua. Es uno de los hábitos que más rápido olvidamos en vacaciones. La ingesta de agua debe mantenerse igual e incluso más, dependiendo dónde estés. En esta época encontramos abundancia de frutas y hortalizas que, además de hidratarnos, son muy bajas en calorías. A media mañana y a media tarde son buenos momentos para tomar piezas de fruta que nos dan el toque dulce y refrescante.
5. Relájate
Estás de vacaciones y nada debe favorecer al estrés. Busca tiempo para meditar y para hacer algunos ejercicios de yoga. Te ayudará a mantener la mente en calma y centrada. Esto requiere flexibilidad e implica adaptarnos al espacio y tiempo que tengamos, en vez de renunciar a ello directamente. No tienes que realizar tus rutinas completas, puedes dedicarle unos minutos de tu tiempo a realizar algunas de esas actividades.
6. No olvides los snacks
Tener los snacks listos para momentos de necesidad puede ayudarte a no desviarte más de lo que quieres y poder seguir disfrutando de tus vacaciones. Lo primero, es salir de casa con snacks sanos a los que recurrir cuando te entre el antojo, en vez de tener que buscar algo bueno en tiendas de paso. ¿Ideas? Barritas nutritivas, granola, nueces y frutos secos, kale, chips. Las frutas también son una muy buena opción.
